Ignacio Lancharro Montiel pronunció este domingo la XVII Exaltación Gloriosa del Santo Rosario de Gines, una cita llena de sentimiento y devoción que tuvo lugar en la Parroquia Nuestra Señora de Belén, que lució especialmente engalanada para la ocasión y presidida por las titulares de la Hermandad.
Tras la presentación del acto a cargo de Juan de Dios Sánchez Mensaque, tomó la palabra la pregonera de 2020, Rocío Mateos Palomar, quien repasó la trayectoria del pregonero, al que dedicó palabras de gran cariño y amistad.
A continuación, el pregonero comenzó explicando cómo la devoción a Santa Rosalía se encuentra en la cotidianeidad de Gines, recuperando vestigios del pasado a través de los recuerdos de su abuela y de los suyos propios para confeccionar una bellísima letanía de fe en torno a la Santa de Palermo.
Lancharro se centró después en el Santo Rosario, repasando la historia de esta oración y destacando que se trata de un rezo de personas sencillas que construyen Hermandad, haciendo hincapié también en cómo el Rosario ha ayudado siempre a los devotos de nuestro pueblo a salir adelante a pesar de las dificultades.
El pregonero, que logró arrancar en varias ocasiones los aplausos del público presente, supo adentrar después a todos los asistentes en los “sentidos del Rosario”, desde los colores hasta los olores asociados a la Hermandad, pasando por los sonidos, el tacto y el gusto relacionados con las devociones a la Virgen del Rosario y Santa Rosalía.
No faltaron tampoco alusiones a Juan José del Castillo y su papel fundamental en la llegada a Gines de la devoción a Santa Rosalía, insistiendo el pregonero en la necesidad de que los cristianos evangelicen mediante los hechos, demostrando que la Iglesia mejora la vida de las personas.
El acto contó con la presencia de los hermanos mayores y representantes de las hermandades locales, así como del Alcalde, Romualdo Garrido.
A modo de cierre, el Hermano Mayor de la Hermandad del Rosario y Santa Rosalía, Agustín Galindo, entregó al pregonero un obsequio en señal de recuerdo, recibiendo una vez más el aplauso de todos los presentes en un acto que supone la puerta de entrada a las Fiestas del Rosario en Gines.