La Hermandad del Rocío de Gines culminó este miércoles su peregrinación 2019, un camino que se iniciaba una semana antes y que ha venido marcado por el buen tiempo a pesar de desarrollarse en junio.
Tras realizar el último sesteo en La Vereda de Bormujos y atravesar este vecino municipio, a media tarde la Hermandad entraba en Gines, donde era recibida por un gran número de vecinos y vecinas que salieron a dar la bienvenida a los romeros.
Presidida por la carreta del Simpecado, que para la ocasión lució engalanada con flores blancas, la comitiva avanzó por las calles del municipio, siendo agasajada con distintas entregas florales.
Cabe destacar que, al igual que el día de la salida, también este día las calles y diversos puntos emblemáticos fueron adornados desde el Ayuntamiento con los tonos amarillo y verde, corporativos de la Hermandad.
Debido al reciente fallecimiento de un vecino de Gines hermano de la Hermandad, en señal de respeto se suprimieron los tradicionales cantes que suelen acompañar a este día.
A su llegada a la Avenida de la Constitución, el Alcalde en compañía de varios concejales realizó la habitual entrega de un ramo de flores al Hermano Mayor y a la Hermandad a modo de bienvenida al pueblo.
Tras despedir una a una a las carretas dando las gracias a sus respectivos carreteros, la comitiva avanzó por el Paseo Juan de Dios Soto y la calle Real, haciendo las respectivas presentaciones ante el resto de hermandades locales.
En medio de un ambiente de recogimiento, en torno a las 23.30 horas, tras el rezo de una oración y acompañada por la luz de las bengalas, el Simpecado entraba de nuevo en la Parroquia Nuestra Señora de Belén, culminando así el camino número 92 de la Hermandad del Rocío de Gines a la aldea almonteña.