Apenas un año ha bastado para tender, entre Gines y Etiopía, uno de esos lazos amistad que se basan en el cariño más sincero y en la ayuda sin pedir nada a cambio.
El origen de esta entrañable historia viene de la mano de la ONG para el desarrollo NORU, radicada en nuestro pueblo y que cuenta con numerosos socios en la localidad. El suyo es, sin duda, un concepto novedoso de ayuda al desarrollo, entendido como una forma de ayudar a quien lo necesita a través de la formación, siempre con el objetivo de favorecer el aprendizaje de un oficio con el que jóvenes y mujeres en situación de marginalidad puedan ganarse la vida.
Bajo esa premisa, se puso en marcha hace unos meses un taller de tapicería en la ciudad etíope de Hawassa. Los cooperantes de Gines Cayetano Gálvez ‘Tano’ y José María González fueron los encargados de crearlo sobre el terreno y prácticamente de la nada, aprovechando para ello los conocimientos como tapicero del propio Tano.
Tras una primera estancia en la que se formó a un monitor local en tapicería, recientemente los cooperantes de nuestro pueblo volvieron a Etiopía para seguir con el proyecto, cuyos resultados se valoran muy positivamente desde la ONG. Así, en este segundo viaje a tierras africanas se ha continuado con la formación de Dagne, el monitor local, y se han incorporado dos jóvenes aprendices de unos 15 años de edad (Betty y Dagui) que ya se están iniciando también en las técnicas de la tapicería.
Paralelamente, se han seleccionado otros 20 niños y niñas de entre 7 y 14 años, todos ellos en riesgo de exclusión social, a cuyas familias NORU va a ofrecer apoyo económico y de equipamiento para evitar que los pequeños abandonen sus estudios, tal y como indica su presidente, José María González.
Por su parte, Tano vivió el reencuentro con Etiopía y su gente como algo de lo más especial, comprobando de primera mano el buen trabajo desarrollado en estos meses tanto por el monitor local como por los nuevos aprendices.
No han sido, sin embargo, unos meses fáciles. La lejanía y la soledad han hecho mella en Tano, que ya en su primera estancia en Etiopía tuvo que atravesar una compleja adaptación debido a su carácter eminentemente familiar.
Como ya le ocurriera en su primera estancia en tierras etíopes, a su regreso a Gines Tano ha dejado buena parte de sí mismo entre la gente de Hawassa. Confiesa que la ayuda a quien lo necesita es algo que deja una huella imborrable, y por ello sigue pensando a diario en regresar a África para continuar ayudando.
El pasado 28 de febrero, dentro de las celebraciones del Día de Andalucía en el municipio, Tano recibió el reconocimiento como Ginense del Año en el apartado de Cooperación Internacional, un homenaje por el que se muestra especialmente agradecido al Ayuntamiento.
Prácticamente todos los recursos de los que dispone NORU se emplean en la ejecución efectiva de los proyectos, tratando de optimizar al máximo los materiales y la dotación económica disponible. En este sentido, la delegada de la ONG en Sevilla, Eugenia Parejo, destaca especialmente la importante colaboración económica del Ayuntamiento de Gines, a la que se espera que se una próximamente la de la Diputación Provincial, completando con ello un importante apoyo institucional para estas iniciativas de ayuda al desarrollo.
NORU completa sus recursos económicos gracias a su participación activa en diferentes actos y eventos para recaudar fondos, como el Mercado Medieval y Navideño de Gines, además de las aportaciones realizadas por sus socios, unos 85 actualmente, por lo que desde la ONG se hace un llamamiento para impulsar la incorporación de nuevos asociados.
El proyecto de ayuda a estos jóvenes etíopes continúa consolidándose a buen ritmo. De hecho, desde NORU se piensa ya en las fases a desarrollar en los próximos meses, entre ellas la creación de un segundo taller de oficios, en este caso centrado en la carpintería.
Lo que hace apenas un año comenzaba como una idea que rondaba a estos vecinos de Gines, es hoy una realidad de la que nuestro pueblo puede sentirse más que orgulloso, toda un muestra del carácter solidario de un pueblo que no se cansa de seguir ayudando a los que no tienen nada.